En la revista “La Organización del trabajo y el estrés” publicado por Institute of Work, Health and Organisations, en términos generales, un trabajo saludable es aquel en que la presión sobre el empleado se corresponde con sus capacidades y recursos, el grado de control que ejerce su actividad y el apoyo que recibe de las personas que son importantes para él.
La presión laboral es una de las condiciones que más requieren las empresas al solicitar vacantes. Y es que en épocas difíciles, se espera además de que el nuevo candidato, pueda reunir varias cualidades y hacer varias tareas también pueda lograr objetivos en tiempo récord.
Esta presión por lograr objetivos empieza con los más pequeños desde que están en las aulas escolares: “Para ganarte una estrellita tienes que terminar tu tarea hasta que finalice la hora” y se sigue repitiendo en años superiores para alcanzar una buena calificación y el pase de año.
El trabajo bajo presión es uno de los principales causantes del estres tanto infantil como adulto. Y es que en estas condiciones, la persona experimenta un alto grado de ansiedad cuando por ejemplo, tiene un examen, una lección oral o una presentación en público,etc.
En algunos países asiáticos como Japón, China o Corea del Sur, el estrés sigue siendo la primera causa de suicidio entre los jóvenes. El estrés relacionado con los estudios fue la principal causa de suicidio con el 28 por ciento de los casos, mientras los problemas económicos ocuparon el segundo lugar con el 20,5 por ciento.
En el mundo laboral, los suicidios de los altos ejecutivos han generado debates de los altos niveles de estrés bajo los que los trabajadores experimentan en sus labores, pues llevaron a pensar que existe una relación entre el estrés extremo y el suicidio.
Según un artículo publicado por la Universidad de Pennsylvania, ésta es una tendencia que está aumentando en las grandes empresas.
Pero ¿Qué sucede si en cambio la persona no tuviera presión en su trabajo? ¿No obtendría los resultados esperados?. No es posible generalizar, cada persona reacciona de manera diferente ante una situación por lo que no podemos afirmar que sea cierto.
A mi forma de ver el llamado “Trabajo bajo presión” no sería un condicionante de trabajo siempre que la persona que escojamos para ocupar determinado cargo, lo haga con pasión.
Cuando una persona hace las cosas porque le gusta, no porque las tiene que hacer, todo fluye más naturalmente y va a tener mejores resultados que hacer el mismo trabajo por miedo y lleno de inseguridades.
Esto no quiere decir que no se le pongan reglas y metas, pues toda empresa tiene que establecer sus objetivos que debe transmitirlos a sus empleados para que todo esté alineado en la empresa.
Mi punto de vista es que debemos saber escoger a las personas además de sus logros y estudios, también por su motivación y actitud positiva. Cuando la persona está en armonía, transmite armonía y todo lo que lleve a cabo será con armonía. Recomiendo leer la publicación Estimulando mentes creativas para el siglo XXI
En el caso de los estudiantes, estos es mucho más delicado porque si bien no todos los estudiantes van a destacarse en una sola asignatura, debemos que tener en cuenta que cada uno de nosotros tiene una mezcla de diferentes inteligencias múltiples, Cada uno somos una combinación única de ellas y el profesor y el padre de familia debe motivar al niño e incentivando cada uno de sus talentos. Les recomiendo leer también mi publicación Importancia del desarrollo de Inteligencias Interpersonales e Intrapersonales de Gardner en el Siglo XXI (Segunda edición)
Personalmente, considero que es importante establecer reglas desde que son niños, y motivarles a hacer lo que a ellos más les gusta con refuerzos positivos. En un entorno positivo, de alegría y feliz, el niño se va a sentir en un ambiente tranquilo, relajado pero sabiendo que tiene que terminar tareas porque esas son las reglas. No estoy de acuerdo con las amenazas ni refuerzos negativos porque considero que la persona va a entrar en estado de estrés y por ende, va a empezar a tener problemas de salud que la van a impedir su buen desempeño en el trabajo.
Cuando la persona se encuentra en un ambiente laboral feliz, con buena energía, es donde su creatividad y su rendimiento van a aumentar porque se va a sentir motivado haciendo lo que tanto le gusta. No solamente se habla de estímulos económicos, porque hay factores que a mi criterio pesan mucho más que el beneficio económico.
Conozco varias personas con las que he conversado y han estado indecisas en cambiarse de trabajo porque se les ha presentado una excelente oferta con un mejor sueldo pero no saben si aceptar porque el puesto requiere de bastante trabajo a presión. Considero que esta decisión, va depender de los objetivos de crecimiento que tenga la persona, pero si es importante que tengan presentes que la parte económica es muy importante y seguramente indispensable para el sustento familiar. Pero si por más sueldo, la persona estaría sacrificando su salud, tiempo de familia, estrés máximo, ambiente negativo, etc. Es mejor optar por su felicidad y tranquilidad familiar.
En estas épocas de crisis, lamentablemente nuestra realidad hace que las empresas desarrollen un cargo e idealicen a la persona que creen que tendrá las cualidades para ocuparlo. Son tantas las personas que están dispuestas a ocupar este puesto con todos los requerimientos que exigen que el candidato, al ser seleccionado, entra con mucha energía y feliz de ocupar la nueva vacante. Hay muchas empresas que se preocupan de que su cliente interno (el empleado) se desarrolle en un buen clima laboral y lo motivan con capacitaciones, promociones, incentivos, etc. Pero también hay otras, que una vez que empieza a ocupar el cargo, le empiezan a exigir cada vez más, se les da otras responsabilidades, se aumentan las expectativas y se aumenta también la presión.
Aquí es donde la persona empieza a experimentar niveles de ansiedad que pueden terminar en estrés crítico y otras enfermedades.
En conclusión, lo objetivos y las reglas son necesarias tanto en el ámbito escolar como laboral. Para que haya buenos resultados es necesario un buen ambiente de trabajo o de estudio donde el niño o el adulto se sienta motivado y valorado.
La motivación y positivismo de padres y maestros debe estar presentes en todo momento en su época infantil y prevalecer en la adultez. De esta forma la persona que se inserte en el mercado laboral tendrá seguridad en sí mismo, con confianza en que tiene un gran talento e inteligencia para determinada actividad. Esta actitud y confianza en sí mismo, lo hará destacarse en su trabajo y principalmente, lo hará con pasión. Todo esto se verá reflejado en sus buenos resultados académicos y laborales.
Bibliografía
- Imagen: http://www.colcob.com/
- El Comercio, 2014, El estrés laboral puede conducir al suicidio, http://www.elcomercio.com/tendencias/estreslaboral-sindromedeburnout-suicidios-trabajadores-estudios.html, 26/10/2016
- Institute of Work, Health and Organisations (I-WHO), 2004, Organización del Trabajo y el estrés, Reino Unido, http://www.who.int/occupational_health/publications/pwh3sp.pdf, 26/10/2016
- Torres, Claudia, 2016, Estimulando mentes creativas para el siglo XXI, Formared, Quito, Ecuador, http://formared.blogspot.com/2016/01/estimulando-mentes-creativas-para-el.html, 26/10/2016
- Torres, Claudia, 2013, Importancia del desarrollo de Inteligencias Interpersonales e Intrapersonales de Gardner en el Siglo XXI (Segunda edición), Formared, Quito, Ecuador, http://formared.blogspot.com/2013/10/importancia-del-desarrollo-de.html, 26/10/2016
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